Primero que nada, tendríamos que recordar el porque del uso de las normas en la familia,
¿Por que los limites?
¿Por que no podemos hacer cada uno lo que queremos?
Después de todo en nuestra familia es donde se supone que debemos de sentirnos a gusto, disfrutar, relajarnos, entonces… ¿por que las normas?
Bueno, es que para tener una familia en donde haya armonía, en donde se pueda convivir en paz, en donde exista el respeto y la aceptación, pues definitivamente se tienen que seguir ciertas normas, para que todos los que viven en esa familia puedan disfrutar y relajarse, descansar, pasársela bien, pero sobre todo crecer individualmente.
En una familia, los integrantes van llegando poco a poco. Primero dos personas deciden comenzar una vida juntos, en esa relación tuvo que haber adaptación, y se gestionaron también ciertas normas para poder convivir en paz y armonía, por ejemplo, el uso del baño, la planeación de la comida, los gastos, lo quehaceres de la casa… en fin, tuvieron que plantar ciertas normas para seguir creciendo como familia.
Después llegan los hijos, y los padres se dan cuenta que necesitan cambiar y agregar ciertas normas, como el ayudar con el bebe los dos, el tal vez cambiar de quehaceres para que los dos padres puedan tener una vida un poco mas balanceada.
Conforme los hijos van creciendo, los hijos se dan cuenta que han llegado a una familia en donde se busca la paz y la armonía en todo momento, pero a la vez, esa paz y armonía a veces no tiene lógica para todos, cada hijo es diferente y al ir creciendo pueden pensar que para ellos estar en paz y armonía es estar despierto hasta las dos de la mañana, llorando, jugando, oyendo música, leyendo, texteando, saliendo con amigos, etc.
Desde el punto de vista de los hijos, puede ser que piensen que eso esta bien para ellos, y no importa tanto si esta bien para todos los demás. Esto es normal, cada uno percibe desde su punto de vista que tal vez no todas las normas favorecen a todos en todo momento… es ahí en donde alguien tiene que hacerse cargo de seguir manteniendo la armonía y el respeto dentro de la familia, y como los padres fueron quienes comenzaron con esa familia, es en ellos en donde recae la responsabilidad de seguir creando normas para el bien de TODA la familia, a esa responsabilidad se le llama Autoridad.
“Como la familia es una sociedad, compuesta por los padres y los hijos, necesita también de un gobierno y de una autoridad que dirija a sus miembros hacia los fines de a institución familiar”- (Etica Social, Rodriguez Angel Luño)
¿Que es Autoridad?
La Autoridad no es sinónimo de opresión, dictadura, La palabra, como tal, proviene del latín auctorĭtas, auctoritātis, que a su vez deriva del verbo augure, que significa ‘aumentar’, ‘promover’.
“El concepto de autoridad hace referencia a una potestad que logra alguien, a un líder legitimo y a alguien que obtiene poderes o facultades sobre un grupo de personas”. (RAE)
Los padres tienen la responsabilidad de hacer crecer a cada miembro de la familia, con respeto y armonía. De ver por cada miembro, y de tratar a cada uno de forma diferente.
Entonces a ver… ¿debemos tener diferentes reglas para cada uno? Bueno, si, pero habrá normas generales que ayuden a toda la familia, como horas de llegada, tareas de la casa, respetar las cosas de los demás, tratarse bien unos a otros…
Muy bien, esto se oye fácil, ya con esto todas las familias, lograrán caminar por el mejor camino, todos los padres tendrán hijos ejemplares, y la sociedad será cada vez mejor… mmm, no… ¿que pasa entonces? ¿Cual es el problema de no saber ejercer bien la autoridad? ¿Por que a veces nos pasa como padres, que, en el momento de las dificultades, la autoridad no funciona y al final todos terminan enojados?, Y llegamos hasta las consecuencias, pero no muy buenas consecuencias.
Bueno, pues es muy sencillo, el ser humano, todo ser humano, padres, madres e hijos tenemos libertad, y tenemos emociones y pasiones, y a veces nos dejamos llevar por ellas de una forma no tan racional, algunas veces no sabemos escoger muy bien el mejor camino para llegar a nuestro destino.
Con esto dicho, sabemos que los padres queremos lo mejor para nuestra familia, queremos ayudar a nuestro esposo o esposa a ser una mejor persona, queremos y debemos ayudar a nuestros hijos a ser mejores… pero a veces escogemos mal ese camino de ayuda… y lo hacemos por diferentes razones, hay veces que estamos cansados, enojados, angustiados, asustados, tristes, alegres, relajados, confundidos, y tanto padres como hijos tomamos decisiones erróneas, que no solo nos afectan a nosotros, sino también a nuestra familia.
Aquí es en donde comienzan los diferentes caminos que como padres tomamos. En el caso de la autoridad, si nos acostumbramos desde el principio a regañar a nuestros hijos por todo, sin paciencia, sin amor, sin control, esta forma de dirigir a la familia se vuelve costumbre, un vicio. El padre o la madre, se desespera rápidamente, regaña fuerte a la primera, el hijo llora o se enoja, los padres se enojan mas, gritos, mas gritos, castigos y el tema nunca se acaba.
Vámonos del otro lado, hay padres que se acostumbran a que sus hijos hagan travesuras y eso les causa risa, incluso se los fomentan, se ríen. Pero un día, las travesuras ya no son tan travesuras, los berrinches ya no paran, el padre ya no sabe como parar, prefiere no mirar, “has lo que quieras” ha sido siempre su respuesta, el hijo crece haciendo cosas que tal vez no quiere hacer, pero no hay quien lo pare, no hay consecuencias, no hay gritos, y el tema nunca se acaba.
Hay padres también a quien les da miedo A veces si quieren decir las cosas, al principio los padres lo hacían, tenían bien controlado el asunto, sabían bien como. Pero un día su hijo o hija creció y ya no pueden seguir, prefieren mantener abierta la “comunicación” que decirle que no a su hijo/a, lo que no se dan cuenta es que esa comunicación es ficticia, realmente los hijos no saben bien como controlarse, y se dan cuenta que sus papas tampoco saben, se sienten solos, inseguros, no tienen limites y no saben como ayudar a sus papas pues son muy inmaduros para entender que las cosas han cambiado, pero que ellos siguen necesitando de esas normas que los mantenían cercanos a alguien que veía por ellos.
Muy bien, ya pusimos un poco el asunto en la mesa: los problemas que a veces tenemos los padres acerca de la gestión de autoridad en la familia.
Ahora veamos quienes somos y como podemos mejorar:
Primero que nada, intenta encontrar un cuestionario de estilos educativos en Internet, para que te conozcas mejor y así puedas mejorar en tus áreas de oportunidad.
Ahora bien, es importante saber que la Autoridad, aunque se herede o se imponga, se gana a base de respeto y de amor.
Para ejercer una buena autoridad es importante:
- Respetar la dignidad de la persona
- Ayudar a la persona a llegar a su fin ultimo.
La autoridad es amar, es servir, realmente es estar al servicio de otros para ayudarles a desarrollarse plenamente, con respeto y con amor.
El amor no es hablar cursilerías y aparentar que siempre todo esta bien con todo, que todo nos gusta sobre lo que hacen los demás. Amar es conocer al otro, aceptarlo y ayudarle a sacar lo mejor de si mismo.
“¿Por qué regañas a tu hijo? ¿Porque estás muy cansado y no quieres que te moleste? ¿Porque se equivocó— en la forma que le dijiste que barriera el patio? ¿Por qué? Esta es la pregunta que, como padres, nos hemos de hacer siempre que mandemos algo a nuestros hijos. ¿Por qué lo hago? ¿Busco su bien? ¿Deseo que sea mejor persona?
Recuerda que los hijos son el fruto del amor, de la entrega total y mutua de los cónyuges.”
- Francisco De Paula Cardona
¿Que tipos de Autoridad existen dentro de las familias?
Tipos de Padres | Padres Permisivos | Padres Autoritarios | Padres Negligentes | Padres Sobre – protectores | Padres Asertivos |
| Sin horarios ni rutinas, desorden. Baja capacidad de control Poca supervisión Nivel bajo de exigencia Normas escasas o inexistentes Mas refuerzo positivo que castigo Falta de Autoridad Les cuesta trabajo decir “no” por lo que delegan a su pareja las decisiones difíciles. | Nivel de exigencia alta Disciplina y Obediencia Normas rígidas No da lugar al dialogo Aplica castigos, punitivo Da ordenes, no deja elegir. Escaso apoyo emocional Mayor empleo de castigo que de refuerzo positivo | Nula implicación Desatención y desprecio Fríos y controladores Sin exigencias ni normas No hay responsabilidades Indiferencia Falta de apoyo | Absorbentes Dominantes | Nivel de exigencia alto Expresión de afecto Normas claras y concisas Utiliza el esfuerzo positivo Buena la comunicación Ofrece apoyo, ayuda Otorga capacidad de decisión Perseverantes |
Hijos | Libertinos Sin Limites Irrespetuosos Rencorosos Poca disciplina y auto exigencia No son persistentes | Violentos Agresivos Resentidos Rencorosos Aislados Temerosos Se pueden convertir en agresores | Solitarios Depresivos o ansiosos | Inseguros Dependientes Sin autonomía débiles | Lideres Responsables Con Valores Autónomos seguros |
¿Que quisiéramos para nuestros hijos?
- Que crean en si mismos, en sus capacidades que tengan una autoestima alta en donde se aprecien como personas.
- Que se sientan mas valorados que criticados
- Que sean tolerantes a las frustraciones diarias.
- Que establezcan objetivos en sus vidas y se esfuercen por cumplirlos.
- Que disfruten la vida mas que sufrirla.
- Que confíen en sus padres.
- Que sepan aceptar sus propios errores
- Que confíen en las personas y en el futuro
- Que respeten a los demás y sepan convivir y cooperar.
- Que se sientan bien en casa y fuera de casa.
- Que crean en la familia como célula básica de la sociedad.
- Que sean sociables
- Que sepa expresar sentimientos negativos y positivos de manera adecuada
- Que tengan principios y luchen por conservarlos
- Que crezcan en virtud.
Ahora, aquí dejo algunas sugerencias que tal vez puedan ayudarnos a mejorar como padres respecto a la Autoridad:
- Demostrar amor a los hijos es el primer paso, no tengas miedo, las muestras de cariño van implícitas en la naturaleza de todo ser humano, trata de no gritar a los hijos, no por eso van a respetar mas tu autoridad, esto es totalmente inapropiado, ya que en lugar de que los hijos acepten la autoridad, adquieren miedo hacia ti y cuando vencen el miedo empiezan a tomarte la medida.
- Celebra sus logros, cuando alguien nos dice lo bien que quedo algo, es nuestro reflejo volver a intentarlo porque sabemos que a los demás les gusta, si alguien te dice, oye que bien te sale la carne asada, vas a tratar de hacerlo mas veces, porque sabes que a los demás les gusta, si alguien te dice: “¡que bien escribes, lo deberías de hacer mas!”, trataras de hacerlo mas por que te das cuenta que eres bueno en eso! Lo mismo les pasa a nuestros hijos. No se trata de decirles que todo lo hacen bien, sino de realmente conocerlos y enseñarles a descubrir sus puntos fuertes y explotarlos al máximo.
- Pierde el tiempo con tus hijos, ten momentos especialescon cada uno, a veces no hace falta decir nada, puedes jugar un video juego con el o ella, pueden ir a ver una película juntos, jugar un juego, ¡ir por un helado… ¡sé creativo!
- Hacer uso de la autoridadde forma inteligente. Es mejor motivarlos a ser buenos que infundirles temor por portarse mal. Los mismos padres al tener perder esa autoridad se pueden ir a extremos, y pasan de la autoridad al autoritarismo incomprensible. Este tipo de comportamiento hace que los hijos en lugar de respetarlos piensen que no saben mandar, que son personas injustas y se alejan de ellos. Mantén siempre la calma, la serenidad, el dominio personal. Nunca ejerzas tu autoridad en la familia si estás de mal humor, enojado o con un coraje. Eso te hará que no pienses bien. Lo mas probable es que puedas ofender a alguno de tus hijos. ¡Detente! ¡Serénate! ¡Respira hondo! ¡Tranquilízate! Cuando lo hayas hecho, entonces ahora sí, da la orden que se necesite.
- Intenta razonar con tus hijos al aceptar una petición, al darles permiso de algo al negarles el permiso, o al exigir una conducta determinada. SI después de razonar con ellos, no hay acuerdos, recuerda que tu eres el padre o la madre y tu tienes que decidir, tu eres quien pone las normas y sabe la razón de esas normas. Conforme tus hijos vayan creciendo trata de ir dejando que ellos aprendan a decidir de una forma acertada según las circunstancias, siempre con limites y consecuencias, pero recuerda que tu meta es formarlospara que sean unos adultos responsables.
- Otro punto importante para mejorar la autoridad es, dar razones claras. No es bueno decir “aquí se hace lo que yo digo porque es mi casa y yo pago por todo” … error… ese no es el objetivo de las normas, el objetivo real es la misión de los padres, y esa misión es cuidar de los hijos lo mejor que se pueda, prepararlos para la vida adulta, y mientras estén bajo la responsabilidad de los padres, deben de hacer lo posible para que crezcan de forma adecuada, aunque a veces a ellos no les guste y no lo entiendan. Tener reglas y limites claros y concisos, de esta forma los hijos tienen claro lo que está permitido y lo que no se pueden realizar dentro o fuera del hogar. La autoridad de los padres en casa se debe pedir por medio de argumentos claros y justos.
- Apoyar a los hijos cuando estos lo requieran. Tus hijos apreciaran cada vez mas tu autoridad cuando vean que tu siempre estas presente, en las buenas y en las malas, que los aconsejas con respeto y con amor, guiándolos siempre a tomar la mejor decisión para su pleno desarrollo. El apoyo de los padres es un elemento de vital importancia, para que exista una relación de amor y respeto entre padres e hijos.
- El ejemploes de vital importancia. No es educativo decirles a tus hijos que no fumen o no tomen cuando tu mismo lo haces, la autoridad de los padres depende en gran parte de su comportamiento y de que las reglas se ajusten al mismo. Ahora bien, habrá momentos en que tendrás que explicar que las reglas son diferentes para unos y otros, depende de la situación, la edad, etc. Si realmente quieres que tu hijo mejore tu también trata de mejorar, si quieres que tu hijo respete las normas generales, tu también respétalas.
- Para incentivar la autoridad en casa es apropiado que te tomes el tiempo para estar tranquilo después de un acontecimiento desagradable. Cuando existen problemas entre padres e hijos es importante que los padres se tomen el tiempo necesario para calmarse, con el objetivo de solucionar la situación de forma apropiada.
- Apoya SIEMPRE la autoridad de tu esposa/o,NUNCA se contradiganen frente de los hijos, si no estas de acuerdo con algo, háblalo en corto con tu esposo/a, y decidan JUNTOSla solución. De cada uno de los cónyuges depende el respeto que los hijos le den al otro.
- Cada hijo es diferente, habrá también que ejercer la autoridad de forma diferente con cada uno, las reglas serán tal vez muy parecidas para todos, pero no estas a cargo de una escuela militar, es una familia, en donde cada uno tiene una edad diferente y personalidades diferentes.
- Sé muy perseverante, no te rindas, continúa día a día. La autoridad hay que ejercerla siempre, sin desfallecer. El día que no lo hagas, se perderá todo lo que hayas logrado.¡Animo!